[Las citas entre comillas son frases originales del autor.]
Ciencia estética o nandana vijinana es dar felicidad a la Conciencia
Cósmica y obtener al mismo tiempo felicidad de ella.
La Ciencia estética explica que los seres humanos se sienten atraídos a
través de los cinco Tanmatras (pequeñas partículas, ondas genéricas) que
emanan del mundo físico y ellos, los seres humanos, corren hacia los
objetos sintiéndose atraídos. En realidad es el Creador que nos atrae a
través de las manifestaciones externas de Su creación.
Por el contrario, en la Ciencia Supraestética, las vibraciones emanan
del nucleo de la Conciencia Cósmica directamente y a través de nuestros
pensamientos. La Ciencia
Supraestética implica que el Ser Universal llama a los microcosmos a
través de vibraciones o inferencias ectoplásmicas o a través de Sus
encantos irresistibles. Krsna, el Supremo, atrae a los seres humanos con
pensamientos internos de amor, lo cual ayuda a los microcosmos a progresar
hacia Su núcleo.
Podemos ver que hay una gran diferencia entre la Ciencia Estética y la
Supraestética. La Conciencia Cósmica siempre está atrayendo a los
microcosmos. Todas las entidades del universo se atraen unas a otras, pero
la Conciencia Cósmica atrae a todos por la fuerza de Su amor y Su relación
personal con cada uno. Cuando las personas sienten este tipo de atracción
en sus corazones, hacen lo posible por guiar a otros al encuentro del Supremo, amando además cada una de Sus expresiones. La Conciencia
Cósmica es el eje de la Ciencia Supraestética.
Atracción a través de Tanmatras
(ondas genéricas, pequeña fracción de algo)
Los microcosmos conocen el mundo que los rodea a través de los cinco
Tanmatras, inferencias genéricas u ondas que emanan de los objetos. Los
cinco Tanmatras son: el aroma, el gusto, la forma, el tacto y el sonido.
La percepción de estos cinco Tanmatras es el único modo de conocer el
mundo externo. En el
caso de la Ciencia Estética, las ondas emanan del mundo físico, pero en la
Ciencia Supraestética las ondas emanan directamente del mundo ectoplásmico
de la Conciencia Cósmica.
AROMA. Algunos devotos logran estados profundos de meditación, perciben un
aroma muy dulce y se preguntan de dónde viene. Lo perciben en la mente y
luego en el mundo externo. Krsna atrae a los devotos a través de este
tipo de aroma dulce; los devotos corren hacia Él sintiéndose
bienaventurados. La atracción es tan poderosa que los devotos no pueden
dejar de correr psico-espiritualmente hacia Él.
GUSTO: Sabor dulce. Dulzura.
La naturaleza del universo es dulzura y no amargura. La Conciencia Cósmica
cuenta con ciertos métodos para acelerar nuestro progreso, que aunque a
veces nos resultan arduos, en el fondo encierran el amor más profundo
por nosotros; por lo tanto Él nos atrae a través de Su dulce flujo
característico.
Una de las relaciones con el Supremo que da mucha dulzura es madhura bhava;
la de un amado. Esta idea llena al devoto de felicidad y lo hace correr
a Su encuentro. Él nos atrae desde el mundo ectoplásmico envolviéndonos a través
de los lazos de amor. Aunque la mente quiera olvidarle, no puede.
FORMA: Onda que transmite visión.
Cuanto más evoluciona la creación, ésta se vuelve más perfecta y bella.
Los pájaros y las plantas son más hermosos que los ladrillos, y los
humanos más que los últimos. La mente humana está llena de dulzura,
ternura y suavidad. Todas estas formas son cualidades ectoplásmicas del
Supremo dentro de la mente humana y son más sutiles que las formas o
expresiones externas. A través de estas expresiones Él nos está
diciendo,"Ven a mí". "Tendrás que venir". La humanidad no puede resistir a
Su llamada.
"Mis ojos están saturados con el goce de hermosas formas. Mi mente está
colmada de Sus cualidades. Cada uno de mis miembros anhela fundirse en
Él."
TACTO: Onda sentimental.
"La Conciencia Cósmica es tan dulce como suave. Las personas experimentan
Su suavidad en la cavidad más profunda de sus corazones y en el punto
controlador del sentimentalismo humano. Allí no hay ámbito para la dureza".
Cuando actuamos con dureza, pronto nos arrepentimos y pedimos internamente
perdón al Supremo. Es porque desde nuestro sentimentalismo, Él nos hace
ver con amor. Internamente nos atrae con Sus cualidades. Su "toque"
sentimental. El no quiere que seamos duros, sin embargo, a menudo en el
mundo externo debemos adoptar cierta dureza para implantar justicia. Aún
los malos, en su fuero íntimo, si profundizaran, encontrarían el flujo
subterráneo del Supremo, y no podrían ser duros.
SONIDO: A través del sonido, Krsna o la Conciencia Cósmica atrae a los
microcosmos, cuya existencia sentimental yace en el plexo básico psico-espiritual
(en el coxis). Cuando el practicante se eleva espiritualmente, va oyendo
de acuerdo con sus diferentes estados de realización existencial, sonidos
relacionados con los diferentes cakras. Al llegar al estado del sonido más
sutil, el practicante percibe a la Conciencia Suprema como el sonido
onm´ka´ra.
"Pero en el último estado de realización, el aspirante descubre que ya no
hay sonido, porque si no hay curvaturas (ondas) no puede haber sonido.
Cuando las ondas se alargan, termina el sonido. Al trascender el sonido, el
aspirante espiritual disfruta de una bienaventuranza sin límites, debido
al paralelismo psico-espiritual. La onda sonora conduce al estado de
comunión entre el sentimiento individual y el Cósmico. Por eso la
Conciencia Cósmica ha estado atrayendo a cada individuo (microcosmos) a
través de todas las percepciones de los Tanmatras."
"El siempre está llamándonos amorosamente muy cerca de Él a
través de los Tanmatras. Éste es el tema central de la Ciencia
Supraestética, es decir, que los seres humanos están siempre avanzando no
sólo en el Vrindavana del mundo físico, sino también en el Vrindavana del
mundo espiritual. Cuando Krsna habitaba en el Vrindavana del mundo físico,
existían ambos Vrindavanas, el físico y el espiritual."
"Hoy, para Sus devotos y no devotos, existe el Vrindavana espiritual y
Krsna
siempre está allí. Él dijo: "No iré a ninguna parte, ni siquiera un paso
fuera de Vrindavana". Este no era el Vrindavana terrenal, sino el
Vrindavana del corazón de los devotos. En él se encuentran el Señor y el
devoto. El Señor a veces juega al escondite, otras nos atrae, y luego se
esconde. Cuando el devoto corre hacia Él, descubre que quien le atraía
detrás de la escena, estaba en realidad muy cerca, y finalmente lo obtiene
(lo alcanza)."
"Estoy siempre en Vrindavana, nunca estoy solo o sin Él. Cuando uno Lo
llama, Él responde."
"Cuanto más pronto uno responde a la llamada de Krsna (Conciencia
Suprema) es mejor. Cualquier demora significa perder un tiempo valioso.
Por lo tanto los seres humanos deben correr hacia Él solamente, ya que el
tiempo es muy corto. Cuando los devotos se aproximan a este Krsna, todas
las expresiones de Parama Purus'a se suspenden en la Existencia Suprema. En
ese más exaltado estado, el devoto exclama con alegría exaltada:
"O mi Señor, mi Parama Purusa (Conciencia Suprema), no dudo en admitir que
he estado incapacitado de realizarte, pero ahora comprendo quién Eres."
"Luego el devoto reuniendo todo su poder, todo su sentimentalismo en un
punto, proclama la más elevada realización."
"O amado Krsna, el protector de los buenos y el redentor de los malos, Te
saludo a cada instante." |